Escrito por Offir Damián Jaimes
TLAPEHUALA, GRO. El pasado 19 de agosto el señor Íñigo Álvarez Galán, comerciante de Tlapehuala, relató en el Primer Foro de Gestión Cultural en el estado de Guerrero, que a la edad de 30 años le nació la idea de investigar la historia de Tlapehuala. Y resaltó que principalmente lo referente a la tradición de la música de este municipio y de la región de Tierra Caliente.
Álvarez Galán, quien además ha sido coordinador de la casa de la cultura de Tlapehuala es un promotor de la música tradicional con el noble interés que esa tradición de la música de violín y tamborita se mantenga viva.
Además, es miembro de la Asociación de Escritores de Tierra Caliente que promoviera el doctor Agripino Hernández Avelar.
Don Íñigo tiene varias publicaciones, entre ellas “Senderos juntos”, “Fundación de ejido de Tlapehuala”, “Memorial de otros días”, “Creadores del Balsas” y “La amistad compartida”.
A sus 79 años, Álvarez Galán acudía cada 15 días a tomar el diplomado de Gestión Cultural y Creación de Públicos promovido por el Instituto Guerrerense de la Cultura (IGC) y el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) desde hace dos años. En su trabajo final habló sobre la música en Tlapehuala y mencionó que la música llegó a Tlapehuala a través de los frailes agustinos y que la música que hoy escuchamos de violín y tamborita de la región es una herencia de mexicas que unen tres formas musicales: de los aztecas, de españoles y de africanos. Y aseguró que de esa unión musical surge en México la música romántica y la popular.
Mencionó que en Guerrero y Michoacán, en la Costa Chica, la música tomó forma en chilena y comentó que Agustín Ramírez fue uno de sus mejores intérpretes.
En la zona de Tierra Caliente de Michoacán, en los municipios de Huetamo, San Lucas y otros, se formaron grupos musicales para interpretar y tocar los gustos y sones. Trajo a colación a Amalia Mendoza y a su hermano Juan Mendoza, que hicieron popular la canción “San Juan Huetamo”.
Virtuoso del violín
Reveló que Ponciano Marcos, en el año de 1795 llegó a Tlapehuala a enseñar música y danza. El presbítero J. Guadalupe Mendoza y Mancera, de nacionalidad chilena, en 1805, llegó a la región calentana, quien era un virtuoso en la ejecución del violín y enseñó violín, guitarra séptima y otros instrumentos a muchos tlapehualenses.
Los organizadores de conjuntos musicales llamados raspa y que, dijo, que su significado era para bailar, fueron Eusebio Cristóbal Chebo Goteras, Esteban Rivera, Jacinto Marcelino, Anastasio Sánchez, Primitivo Salmerón Pastenes, Jacinto Rivera, Gregorio Flores Ventura, Feliciano Medina, Lidia Salmerón Pastenes, Antonio Arzola y Jacinto Flores Ventura El Quintillo.
Dio a conocer que en 1868, Juan Bartolo Tavira, originario de Corral Falso, del municipio de Ajuchitlán, era un trovador que tocaba el arpa y le adjudicó composiciones como La tortolita, El gusto federal y San Agustín.
Isaías Salmerón
Comentó que en 1908 Isaías Salmerón Pastenes, por la muerte de su hermano Lidio asciende como director de un nuevo conjunto musical de cuerdas en el que el primer violín y director fue el propio Isaías Salmerón; segundo violinista, Jacinto Rivera; guitarra panzona, Lamberto Salmerón; guitarra séptima Jesús Salmerón Pastenes; tamborita, Feliciano Merlán.
Mencionó don Íñigo que posteriormente ingresó Filiberto Salmerón Apolinar como primer violín y posteriormente Bardomiano Flores Frías.
Al hablar de Isaías Salmerón comentó que el general Lázaro Cárdenas del Río lo contrató para que con su conjunto musical tocara en los pueblos que visitara en su campaña electoral para gobernador del estado de Michoacán. En Tacámbaro compone dos pasos dobles: Tacámbaro y Lira sahuayense.
Expresó que en 1928 Isaías Salmerón vivió en Amatepec y compuso el paso doble dedicado a ese pueblo y también un gusto. A su pareja sentimental de ese lugar llamada Amalia le compuso el gusto tengo un amor consentido.
El himno de los tlapehualenses
Álvarez Galán, en su ponencia, estableció que fue en el año de 1937, en la localidad de Tamácuaro, municipio de Cutzamala, donde Isaías Salmerón compone el gusto que se ha convertido en el himno de los tlapehualenses: Tlapehuala lucido.
Consideró que fue en 1914 cuando a la región calentana llega la modernidad de la música al organizarse bandas musicales y orquestas.
En 1919, en Tlapehuala, Feliciano Miranda organiza la primera orquesta. En 1922, la segunda por parte de J. Isabel Maldonado Navarro. Y hace una relación de las que continuaron y sus nombres: Orquesta Agrarista, director Froilán Ruiz; Orquesta Tlapehuala, director Bardomiano Flores Frías; 1933, Orquesta Núñez, director Basilio Núñez; 1934, primer orquesta de señoritas integrada por Apolinar Martínez y Carmen Mendoza.
En 1930 la segunda banda musical de aliento fundada por Nicanor Ruiz; en 1948 la Orquesta Salmerón con Filiberto Salmerón Apolinar.
En 1950 Emigdio Galán Anacleto funda la orquesta Río Rosa.
Llamado
Don Íñigo Álvarez, ya casi para concluir su ponencia, hizo un llamado a las instancias correspondientes para que impulsen la actividad literaria, artesanal, turística y cultural de la región de la Tierra Caliente. E hizo alusión al general Cárdenas y el impulso económico que tuvo la región a través de la Comisión del Río Balsas.
De esta forma don Íñigo, a sus años, y aún ejerciendo la actividad de comerciante sigue en este difícil camino de la promotoría cultural.
offirdamian@msn.com
Despertar del Sur, 09 de septiembre de 2011
http://www.despertardelsur.com/ds/index.php?option=com_content&view=article&id=25805%3Ainigo-alvarez-y-su-investigacion-sobre-la-musica-de-tlapehuala&catid=19%3Aespeciales&Itemid=24
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